Cuando se trata de decorar un hotel o algún apartamento turístico con la finalidad de que los huéspedes tengan una estancia agradable, la fusión de la estética y el confort entre en juego. En esta entrada facilitaremos algunos consejos sobre cómo decorar hoteles y acertar siempre.
Piensa en tu Cliente
Para llevar a cabo un proyecto de diseño interior en un hotel, antes que nada debemos de hacer un breve análisis sobre este. Tenemos que tener en cuenta su ubicación, qué tipo de público suele hospedarse, en qué plataformas está patrocinado, el nivel adquisitivo, etc.
Una vez se han definido estos parámetros, toca comenzar con el proyecto de interiorismo. Des esta forma haremos un proyecto ideal para los huéspedes.
Concepto e Historia
Céntrate en alguna historia o concepto que a través de la decoración puedas contar. Algo que siempre suele ser un acierto es alguna historia de la ciudad donde esté ubicado, historia del edificio, etc. Otra opción un poco más simple y minimalista es centrarte en conceptos amplios como por ejemplo la calma y el confort. Esta definición de estilo marcará el hilo conductor del proyecto y servirá como guía principal a la hora de elegir materiales, paleta de colores, textiles, obras de arte, vegetación, etc.
Funcionalidad y Confort
Piensa en aquellos huéspedes que viajan por trabajo o por turismo, normalmente son la mayoría. Ponte en la situación de llegar cansado tras un largo día… Una ducha agradable, una iluminación tranquila y relajada, una cama cómoda y una limpieza impoluta de la estancia.
Como diseñadores de espacios, es nuestra tarea facilitar todos estos detalles que harán de la estancia de los huéspedes una experiencia agradable. Puedes conseguirlo con una buena elección de los colchones y almohadas, una paleta de color neutra, una luz cálida indirecta y unos materiales de fácil limpieza y mantenimiento.
Arte Local y
Los viajeros esperarán conocer el entorno y el lugar que visitan por ello la opción de incorporar en el diseño interior de un hotel obras de arte y artículos artesanos del lugar es una opción con la que siempre acertarás. Imágenes históricas, cerámica, tejidos, etc. Y si quieres tener un detalle con ellos añade productos de la gastronomía como kit de bienvenida.
Muévete por los colores, los olores y la música típica de la ciudad donde se encuentra tu establecimiento, utiliza muebles de calidad y con un diseño no muy atrevido para que sean atemporales y duraderos. En resumen, déjate llevar por el estilo y tradiciones de tu ubicación y adaptado a un estilo relajado.
Puedes ver algunos de nuestros trabajos de interiorismo en El caminante del agua o en el apartamento Torre del Rosario
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¡Hasta la próxima entrada!
